
Solo puedo decir que me resulto familiar, me cabreo y sentí una pena horrible por los dos protagonistas. Esta basada en un hecho real y visto y vivido lo vivido y visto estos últimos meses es algo completamente normal en la vida de muchas personas.
El mentiroso que se cree sus mentiras.
Triste, pero cierto. Empiezan con una mentira sin importancia y eso lleva a otra y otra y ya no son capaces de parar, creyéndose a pies puntillas lo que dicen y saliendo siempre vencedores, justos vencedores, perfectos, compasivos, generosos, justos jueces y verdugos...
Lastima por ellos, que viven su mentira y la cuentan como si fuera la realidad mas palpable, sin pensar siquiera que los oídos que les prestan atención, muchas de las veces son y fueron testigos. Saben la historia, la vivieron de distinta manera, pero no sirve de nada intentar hacerselo ver, ellos han creado "su verdad" y se aferran con fuerza a ella, hasta tal punto que nadie ni nada les hara volver a la realidad.
Da igual que se trate del autor de un tatto, de la forma en que "alojó" a un ser querido en un triste garaje durante un largo y caluroso mundial, de la forma de ayudar a sobrellevar una mala enfermedad o los motivos para anular una cena entre "amigos".
El motivo me da igual, incluso puedo obviar parte de las mentiras, lo que me saca de mis casillas es que con sus jodidas mentiras hagan daño a gente que no se lo merece. Intenten convencer a aquellos que no conocen la historia ni a las personas que las vivieron. Se crean merecedores de halagos y vítores por algo que jamas hicieron o que hicieron mal, no entendieron o no les intereso entender.
No soy perfecta, por supuesto, tengo muchísimos defectos, uno de ellos, reconocer y hasta casi regocijarme en mis continuos errores, otro muy a la vista es el no pararme a pensar en lo que puede pasar cuando abro mi bocaza y suelto lo primero que se me viene a la cabeza o el lanzarme al abismo con mas miedo que vergüenza, pero lanzarme. Alguno de esos saltos pudo dejarme sin lo que mas quiero en esta vida, pero cuando me entrego, lo hago sin cortapisas.... y eso luego pasa factura.
Podría estar hablando de mis errores días, semanas, pero no se trata de eso.
La película acaba bien, no voy a destripar el final por si alguien se anima a verla. A mi me ha servido por lo menos para pasar un rato entretenida y pensar en el karma.... cabrón este karma que parece venir de rodillas en algunas ocasiones.
Animaos a verla. No es El Padrino por supuesto, pero te deja buen sabor de boca y eso hoy en día, ya es mucho.