
La alarma sonó y el protocolo se activo inmediatamente. Las caras tensas, casi se oía el latir de los corazones, todo parecía rodar a la perfección, aunque sabíamos que esto no era una broma, ni un simulacro. Lo de la Cala se quedaba en anda comparado con esto... y mira que aquello seguiremos contándolo como la cagada del verano. Dispuestos ya a salir con otro barco a buscar al ser, una llamada de radio.
- Naranjito,naranjito, naranjito, aquí Alisub, me recibes?
Obviamente salí corriendo y conteste.
- Te recibo,cambio.
- Todo ok, buzos en el barco, salimos para puerto. Tranquila Anica todo ok. Recibido?
- Recibido Luis, aquí os esperamos.
El ser seguia jurando que fueron dos segundos los que estuvo tras el mero, pero aparecio en la Reserva Integral y su excusa barata, indigna, cobarde e insconciente era que Cabo de Palos le tenia mania.
Eso es miedo. Muchisimo miedo.
Pánico es tomar la decisión de pasar las cartas que tengo escritas para que os entreguen en mi velatorio, que dicho sea de paso, lo quiero amenizado con la misma canción que me pusisteis para mi fiesta de cumpleaños y con varias de botellas de Ronmiel y vasitos para que brindéis con buchitos. Me da igual que sea por lo coñazo que fui, lo malisima que parecía o era, porque ya no estoy o porque en algún momento de nuestros ratitos juntos lo pasamos bien o quizás porque os dedique uno de mis días con gracia u otro de los muchos en que no tenia ninguna. Vosotros elegís.
Bueno, a lo que voy, que me lío. Pues eso, estaba yo pensando en como hacer para que los words que tengo con las cartas no fuesen de un lado al otro en el ordenador al alcance de miradas curiosas o que como el año pasado, desaparecieran en un disco duro que decidió pasar a mejor vida sin previo aviso y se llevo con el todas y cada una de vuestras cartas. Que por cierto tuve que volver a escribir.
Quizás una musa estuviese perdida por mi habitación, o puede que fuese la siesta que me había dejado sin sueño, el caso es que así, sin mas, se me ocurrió subirlas al blog y dejarlas como un borrador. Si el disco duro moría, siempre me quedaba la nube. Ahí estarían seguras y a salvo de caprichos de hardware y de casualidades imprevistas.
Dicho y hecho, gracias a la susodicha siesta y la consecuente falta de sueño, me puse manos a la obra.
Primero una, tres... pero claro, la atención a esas horas no es la misma que a primera hora de la mañana, o despejada a cual sea la hora. En una de estas y pasando una en cuestión pelin subida de tono, al ir a guardar y prestando mas atención al mensaje que al gesto mismo de guardar, casi doy al botón de publicar.
ESO ES PÁNICO.
Joder con la informática, las redes sociales y el copón bendito. Una no puede permitirse el lujo de decir ciertas cosas estando viva, menos de dejarlas por escrito y enviárselas a un grupo de personas que te importan mucho y te conocen perfectamente y que por consecuente iban a reaccionar al mensaje en cuestión. Unos muertos de risa, otros asombrados, otros quizás pelin asustados. Esas cosas que están escritas para espero dentro de mucho tiempo no son algo que no diría en vivo y en directo, cierto. Puede incluso que todos hayáis oído salir de mi boca barbaridades peores, o cargadas de muchísimo mas mimo, puede que casi tan directas y tan llenas de humor, amor, temor... pero no tan desde dentro.
No hay forma de que me respondáis, me pidáis explicación, no podéis sonreírme, ni siquiera podéis mirarme, así que todo lo que llevan soy yo a flor de piel, sin filtros.
Eso si es PANICO verdadero y no lo del imbecil que cree que una porcion de oceano esta en guerra con el.
Señores y señoras el miedo tiene niveles y la tecnología me hizo temblar aquella noche.
Que ustedes sigan esperando mucho para saber y leer, sentir y reír, pensar y saber lo importantes que fueron en mi vida.
Se les quiere a casi todos. Ale... a vivir.
1 comentario:
Desde luego, tu si que sabes amenizar un velatorio jodia, y eso que será el tuyo. El caso es dejarnos tocados , más de lo que en ese momento estaremos. Mira que si al final te quedas tu con todas las cartas........
En ese caso, y si puedes por lo menos a mí, cuando sepas que la señora de la guadaña se me acerca, haz el favor de leermela. No quisiera yo irme de este mundo sin conocer el contenido de mi carta, después de tanto tiempo de oír y saber de su existencia
Loli
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